Brillantes y nebulosos cielos , flores despeinadas, frutas descansando en atrevidos manteles multicolor, caballos de lineas suaves y seductoras, luz transformada en figura de ángeles, son los temas de la obra de Marina Petro, artista estadounidense que ofrece una bella colección de pinturas y postales que es un placer admirar. Aquí una breve muestra de ellas:
viernes, 2 de diciembre de 2011
miércoles, 30 de noviembre de 2011
Tener y disfrutar sin retener
Written by Blanca Durán
on 11:05
in Reflexiones, Tener y disfrutar sin retener
with
No hay comentarios
Navegando por ahí tuve la suerte de encontrarme en una pagina que trata temas muy interesantes:sobre la paz, el trascender, terapias alternativa útiles para un bienestar integral y muchos más; debo decir que me gusto todo el contenido y la manera muy completa de organizar y presentar conceptos que ayudan a un sano desarrollo espiritual y personal, ¡me ha encantado! por supuesto desde ya la sigo, debajo de la reflexión que me tome la libertad de tomar, y que aquí les comparto, dejare el enlace para que también se sumerjan en ese delicioso nicho de luz.
Si quieres tener el mar, contémplalo,
y abre tus manos en sus aguas
y todo el mar estará en ellas...;
porque si cierras tus manos para retenerlo,
se quedarán vacías.
Si quieres tener un amigo peregrino,
déjalo marchar y lo tendrás...,
porque si lo retienes para poseerlo,
lo estarás perdiendo
y tendrás un prisionero.
Si quieres tener el viento,
extiende tus brazos y abre tus manos
y todo el viento será tuyo...;
porque si quieres retenerlo
te quedarás sin nada.
Si quieres tener a tu hijo,
déjalo crecer,
déjalo partir, y que se aleje,
y lo tendrás maduro a su regreso...;
porque si lo retienes poseído
lo pierdes para siempre.
Si quieres tener el sol
y gozar de su luz maravillosa
abre los ojos y contempla...;
porque si los cierras
para retener la luz que ya alcanzaste
te quedarás a oscuras.
Si quieres vivir el gozo de tener,
libérate de la manía de poseer y retener.
Goza de la mariposa que revolotea,
goza del río que corre huidizo,
goza de la flor que se abre cara al cielo...,
goza teniendo todo
sin poseerlo ni retenerlo.
¡Sólo así disfrutarás de la vida,
sabiendo que la tienes sin poseerla,
dejándola correr sin retenerla!
Tomado de El Rincón del Relax
martes, 29 de noviembre de 2011
Desde el Reino de Bahréin,Mahmood Al Khaja
Written by Blanca Durán
on 17:52
in Desde el Reino de Bahréin, imagenes, Mahmood Al Khaja
with
No hay comentarios
Un delicado mundo de ensueño y fantasia nos ofrece la obra de Mahmood Al Khaja. Su obra abarca el arte tradicional con acrílicos y aceites de sus pin-up que podemos ver tanto en deiviantArt como en Flickr y el arte digital donde destaca por los colores suaves y sus composiciones entre la fantasía, el surrealismo y una entrada directa al mundo de los sueños y que también presenta en devianArt como manips-of-artist2. Al Khaja nos deja un colección de hermosas imágenes capaces de ilustrar el mejor de los cuentos, una galería desperdicio que vale la pena visitar y perderse en ella. Fuente
lunes, 28 de noviembre de 2011
Puros cuentos.... (imágenes)
Written by Blanca Durán
on 11:35
in carteles, Diseño Gráfico, imagenes, Puros cuentos
with
No hay comentarios
viernes, 18 de noviembre de 2011
Imágenes fantásticas.
Fantásticas, surrealistas, asombrosas las imágenes que he encontrado y no dude en tomar algunas para invitarlos a ir a su sitio de origen a llenarse los ojos de belleza
jueves, 17 de noviembre de 2011
~✿Pensando en voz alta, Feliz cumpleaños a mi...
Gracias a la vida!! es el nombre de una canción llena de verdades: la vida que me ha dado tanto...
Por lo que he tenido y lo que se ha ido, por los momentos de oscuridad y por los días radiantes, por el dolor y la alegría, por los pocos pero buenos amigos, algunos se han marchado aun así en mi corazón su huella ha quedado para siempre. Gracias por la capacidad de amar con medida y a veces desmesuradamente, gracias por el amor que se ha quedado y el rencor que se ha marchado (no guardo basura). Gracias por las veces que me ha faltado capacidad de discernir el bien y el mal: ha sido divertido, ¿Gracias por los errores? no, la verdad que de muchos si me he arrepentido, aunque debo reconocer que me han dejado lecciones inolvidables muchas otras ya no las recuerdo, Gracias por cada sol y por cada luna y también por los días nublados y lluviosos y por las veces que vi nublados los días mas luminosos, Gracias por este corazón enorme donde habitan mis padres, hermanos, abuelos, tías, mi esposo, mis hijos y tantas personas significativas en mi vida, gracias por la capacidad de recordar tantas cosas bonitas y olvidar las menos gratas, hoy apagare muchas velitas y encenderé en mi alma una luz de gratitud a la vida.
Por lo que he tenido y lo que se ha ido, por los momentos de oscuridad y por los días radiantes, por el dolor y la alegría, por los pocos pero buenos amigos, algunos se han marchado aun así en mi corazón su huella ha quedado para siempre. Gracias por la capacidad de amar con medida y a veces desmesuradamente, gracias por el amor que se ha quedado y el rencor que se ha marchado (no guardo basura). Gracias por las veces que me ha faltado capacidad de discernir el bien y el mal: ha sido divertido, ¿Gracias por los errores? no, la verdad que de muchos si me he arrepentido, aunque debo reconocer que me han dejado lecciones inolvidables muchas otras ya no las recuerdo, Gracias por cada sol y por cada luna y también por los días nublados y lluviosos y por las veces que vi nublados los días mas luminosos, Gracias por este corazón enorme donde habitan mis padres, hermanos, abuelos, tías, mi esposo, mis hijos y tantas personas significativas en mi vida, gracias por la capacidad de recordar tantas cosas bonitas y olvidar las menos gratas, hoy apagare muchas velitas y encenderé en mi alma una luz de gratitud a la vida.
miércoles, 9 de noviembre de 2011
Elogio del Silencio
Written by Blanca Durán
on 17:11
in Alberto Maferrer, Elogio del Silencio, Reflexiones
with
No hay comentarios
Silencio es recordar que toda palabra tiene un hoy y un mañana; es decir; un valor de momento y un alcance futuro incalculable.
Silencio es recordar que el valor de la palabra que pronunció no tanto viene de su propia significación ni de la intención que yo le imprimo, cuánto de la manera con que la comprende quién la oye.
Silencio es reconocer que los conflictos se resuelven mejor callando que hablando, y que el tiempo influye más en ellos que las palabras.
Silencio es reprimir la injuria que iba a escapársenos, y olvidar la que nos infirieron.
Silencio es recordar que si hubiera diferido una hora sola mi juicio sobre tal persona o suceso, en esa hora pudo llegar un dato nuevo, que hiciera variar aquél juicio temerario y cruel.
Silencio es recordar que el simple hecho de repetir lo que otros dicen, es formar la avalancha que luego arrastra la reputación y la tranquilidad de los demás.
Silencio es no quejarse, para no aumentar las penas de los otros.
Silencio es decir HICE, en vez de HARÉ.
Silencio es recordar que la palabra al pronunciarla, se lleva una parte de la energía necesaria para realizar la idea que aquélla encarna.
Silencio es no exponer la idea o el plan a medio concebir, ni leer la obra en borrador, ni dar como criatura viviente lo que es apenas un anhelo.
Silencio es la raíz y por eso sostiene.
Silencio es la savia, y por eso alimenta.
Silencio es recordar que si para nuestras cuitas y esperanzas es nuestro corazón un relicario, el corazón ajeno puede ser una plaza de feria y hasta un muladar.
Silencio es el capullo donde la oruga se cambia en mariposa y silencio es la nube donde se forma el rayo.
Silencio es concrentarse, seguir la propia órbita, hacer la propia obra, cumplir el propio designio.
Silencio es meditar, medir, pesar, aquilatar y acrisolar.
Silencio es la palabra justa, la intención recta, la promesa clara, el entusiasmo refrenado, la devoción que sabe a donde va.
Silencio es SER UNO MISMO, y no tambor que resuene bajo los dedos de la muchedumbre.
Silencio es tener un corazón de uno, un cerebro de uno, y no cambiar de sentimientos o de opinión porque así lo quieren los demás.
Silencio es hablar con DIOS antes que con los hombres, para no arrepentirse después de haber hablado.
Silencio es hablar uno calladamente con su propio dolor, y contenerlo hasta que se convierta en sonrisa, en plegaria, o en canto.
Silencio es, en fin, el reposo del sueño y el reposo de la muerte, donde todo se purifica y restaura, donde todo se iguala y perdona.
ALBERTO MASFERRER. ESCRITOR SALVADOREÑO
sábado, 5 de noviembre de 2011
Un cuento de amor y locura
Written by Blanca Durán
on 11:57
in cuento, Cuentos para niños, Un cuento de amor y locura
with
No hay comentarios
Se dice que una vez, hace mucho , mucho tiempo se reunieron todos los sentimientos del hombre. Cuando el aburrimiento habia bostezado por tercera vez, la Locura, como siempre tan loca, les propuso:
-¿Vamos a jugar a las escondidas?
La intriga levanto la ceja intrigada y la Curiosidad sin poder contenerse pregunto:
-¿A las escondidas?...¿y como es eso?
-Es un juego, explico la Locura- en que yo me tapo los ojos y comienzo a contar de uno en uno hasta un millón (se podían esconder en cualquier lugar de la tierra, si contaba hasta 10 no alcanzarían), mientras ustedes se esconden. Cuando halla terminado de contar, el primero de ustedes que yo encuentre tomara mi lugar para continuar con el juego.
El entusiasmo bailó secundado por la Euforia; La Alegría dio tantos saltos que termino por convencer a la Duda, e incluso a la Apatía, a quien nunca le interesaba nada. Pero no todos quisieron participar. La verdad prefirió no esconderse, ¿para que? al final siempre la hallaban, y la Soberbia opinó que era un juego muy tonto (en el fondo lo que le molestaba era que la idea no hubiese sido de ella) y la Cobardía prefirió no arriesgarse...
-Uno, dos, tres...comenzó a contar la Locura-. La primera en esconderse fue la pereza que, como siempre, se dejo caer tras la primara piedra del camino. La Fe subió al cielo y la Envidia se escondió tras la sombra del Triunfo que, con su propio esfuerzo, había logrado subir a la copa del árbol más alto. La Generosidad casi no alcanzaba a esconderse; cada sitio que hallaba le parecía maravilloso para alguno de sus amigos... ¿que si un lago cristalino? le parecía ideal para la Belleza. ¿Que si la hendidura de un árbol?, perfecto para la Timidez. ¿Que si el vuelo de una mariposa? perfecto para la voluptuosidad. ¿Que si una ráfaga de viento? magnífico para la Libertad...Así la Generosidad terminó por ocultarse en un rayito de sol. El Egoísmo, en cambio, encontró un sitio muy bueno desde el principio: ventilado, cómodo...pero sólo para él. La Mentira se escondió en el fondo de los océanos (en realidad tras el arco iris), y la Pasión y el Deseo en el centro de los volcanes. El olvido....no recuerdo, pero en realidad no es tan importante.
Cuando la Locura contaba 999 mil el Amor aún no había encontrado sitio para ocultarse, pues todo se encontraba ocupado, hasta que vio un rosal y, enternecido , decidió esconderse entre sus pétalos.
-¡Un millón! contó la Locura y comenzó a buscar.
La primera en aparecer fue la Pereza, sólo a tres pasos de una piedra. Después se escuchó la Fe conversando con Dios...La Pasión y el Deseo los sintió en el vibrar de los volcanes. En un descuido encontró la Envidia, y claro, pudo deducir donde estaba el Triunfo.
Al Egoísmo no tuvo ni que buscarlo, el sólito salió de su escondite que resulto ser un nido de avispas. De tanto caminar sintió sed y, al acercarse al lago descubrió la Belleza y con la Duda resulto más fácil todavía, púes la encontró sentada sobre una cerca sin decidir aún de que lado esconderse.
Así fue encontrando a todos incluido el olvido que ya no recordaba a que estaba jugando.
Pero el amor no aparecía por ningún sitio.
La Locura buscó detrás de cada árbol, bajo cada arroyuelo, en la cima de las montañas...Y cuando estaba dándose por vencida, vio un rosal y las rosas, tomó una horquilla y comenzó a mover las ramas cuando de pronto, un doloroso grito se escuchó...Las espinas habían herido en los ojos al Amor; la Locura no sabía que hacer para disculparse...Lloró, rogó, imploró, pidió perdón y hasta prometió ser su lazarillo.
Desde entonces, desde que por primera vez se jugo a las escondidas en la Tierra: el Amor es ciego y la Locura siempre lo acompaña.
-¿Vamos a jugar a las escondidas?
La intriga levanto la ceja intrigada y la Curiosidad sin poder contenerse pregunto:
-¿A las escondidas?...¿y como es eso?
-Es un juego, explico la Locura- en que yo me tapo los ojos y comienzo a contar de uno en uno hasta un millón (se podían esconder en cualquier lugar de la tierra, si contaba hasta 10 no alcanzarían), mientras ustedes se esconden. Cuando halla terminado de contar, el primero de ustedes que yo encuentre tomara mi lugar para continuar con el juego.
El entusiasmo bailó secundado por la Euforia; La Alegría dio tantos saltos que termino por convencer a la Duda, e incluso a la Apatía, a quien nunca le interesaba nada. Pero no todos quisieron participar. La verdad prefirió no esconderse, ¿para que? al final siempre la hallaban, y la Soberbia opinó que era un juego muy tonto (en el fondo lo que le molestaba era que la idea no hubiese sido de ella) y la Cobardía prefirió no arriesgarse...
-Uno, dos, tres...comenzó a contar la Locura-. La primera en esconderse fue la pereza que, como siempre, se dejo caer tras la primara piedra del camino. La Fe subió al cielo y la Envidia se escondió tras la sombra del Triunfo que, con su propio esfuerzo, había logrado subir a la copa del árbol más alto. La Generosidad casi no alcanzaba a esconderse; cada sitio que hallaba le parecía maravilloso para alguno de sus amigos... ¿que si un lago cristalino? le parecía ideal para la Belleza. ¿Que si la hendidura de un árbol?, perfecto para la Timidez. ¿Que si el vuelo de una mariposa? perfecto para la voluptuosidad. ¿Que si una ráfaga de viento? magnífico para la Libertad...Así la Generosidad terminó por ocultarse en un rayito de sol. El Egoísmo, en cambio, encontró un sitio muy bueno desde el principio: ventilado, cómodo...pero sólo para él. La Mentira se escondió en el fondo de los océanos (en realidad tras el arco iris), y la Pasión y el Deseo en el centro de los volcanes. El olvido....no recuerdo, pero en realidad no es tan importante.
Cuando la Locura contaba 999 mil el Amor aún no había encontrado sitio para ocultarse, pues todo se encontraba ocupado, hasta que vio un rosal y, enternecido , decidió esconderse entre sus pétalos.
-¡Un millón! contó la Locura y comenzó a buscar.
La primera en aparecer fue la Pereza, sólo a tres pasos de una piedra. Después se escuchó la Fe conversando con Dios...La Pasión y el Deseo los sintió en el vibrar de los volcanes. En un descuido encontró la Envidia, y claro, pudo deducir donde estaba el Triunfo.
Al Egoísmo no tuvo ni que buscarlo, el sólito salió de su escondite que resulto ser un nido de avispas. De tanto caminar sintió sed y, al acercarse al lago descubrió la Belleza y con la Duda resulto más fácil todavía, púes la encontró sentada sobre una cerca sin decidir aún de que lado esconderse.
Así fue encontrando a todos incluido el olvido que ya no recordaba a que estaba jugando.
Pero el amor no aparecía por ningún sitio.
La Locura buscó detrás de cada árbol, bajo cada arroyuelo, en la cima de las montañas...Y cuando estaba dándose por vencida, vio un rosal y las rosas, tomó una horquilla y comenzó a mover las ramas cuando de pronto, un doloroso grito se escuchó...Las espinas habían herido en los ojos al Amor; la Locura no sabía que hacer para disculparse...Lloró, rogó, imploró, pidió perdón y hasta prometió ser su lazarillo.
Desde entonces, desde que por primera vez se jugo a las escondidas en la Tierra: el Amor es ciego y la Locura siempre lo acompaña.